Tanto Sanidad como las comunidades han optado por endurecer las recomendaciones para detener el contagio de coronavirus, en especial en los espacios cerrados como el interior de la hostelería.
Así lo refleja el documento de “Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de la covid-19”, que estas vigente desde el pasado 22 de octubre y contienen un conjunto de medidas que pueden o no tomar las comunidades.
La especial atención que se le aplica a los lugares cerrados es debido a que es donde se producen mayor riesgo de transmisión debido a que están mal ventilados, hay mucha aglomeración de personas y no se respetan las normas de bioseguridad.
Por a esto, se plantea que en la situación de alto riesgo, es decir niveles 3 y 4 de alerta, se elimine el servicio en los interiores de los establecimientos hosteleros en donde se incluyen las terrazas cerradas, esto es para todas aquellas que tengan más de dos cerramientos.
En el nivel alerta 2, se aconseja reducir el aforo a un tercio, una ocupación máxima de 6 personas por mesa, una distancia de al menos 2 metros entre sillas de diferentes mesas, prohibir el consumo en la barra y el alto volumen de la música.
Si se llega al nivel 4, se seguiré valorar el cierre o reducir aún más el aforo en cines, teatros, auditorios, entre otros.
Sin embargo; en los niveles de alto riesgo, se considera que las clases deben ser presenciales a excepción de la universitaria que debe ser a distancia en la medida de lo posible.