La posibilidad de un adelanto electoral en Andalucía antes del verano toma fuerza después de la advertencia que ha lanzado este miércoles el presidente, Juanma Moreno (PP), acotando incluso los tiempos: si en febrero hay un «bloqueo sistemático» de PSOE y Vox, disolverá y convocará «automáticamente».
Ese escenario llevaría a abril o mayo los comicios andaluces, que oficialmente tocan para final de noviembre, ya que desde la disolución del Parlamento autonómico a la jornada electoral deben transcurrir 54 días.
La posición expresada por Moreno no es nueva, pero a menos de dos semanas de que comience el que será el último periodo de sesiones en el Parlamento la cuenta atrás electoral se ha activado.
El detonante ha sido un pleno monográfico sobre sanidad en el que el Gobierno se iba a ver obligado a comparecer por petición de PSOE, Vox y Unidas Podemos, aunque finalmente esa iniciativa no ha salido adelante porque la formación de Santiago Abascal ha dado un giro en el último momento y ha decidido abstenerse.
Fuentes del Gobierno andaluz han explicado a EFE que la intención sigue siendo avanzar al máximo en la legislatura, sobre todo en un momento en el que se prevé una recuperación económica, con unos fondos europeos que permitirán llevar a cabo proyectos importantes.
Sin embargo, Moreno es consciente de que si los decretos y leyes que lleven a la Cámara son rechazados sistemáticamente, no podrá gestionar, lo que repercute en los ciudadanos y en su Ejecutivo.
Si se habla de cálculos electorales, un semestre de anuncios de proyectos clave es importante para cualquier gobierno, mientras que meses de trabas parlamentarias terminarían por erosionarle.
El presidente andaluz siempre reivindica su autonomía para tomar esta decisión, más allá de los intereses de Génova, cuya posición oficial ante los medios de comunicación siempre es de respaldo.
Fuentes populares dan por hecho el adelanto electoral en la comunidad, ya sea en abril, en mayo o en junio, pero mantienen sus dudas por la posición que mantendrá el PSOE durante este periodo de sesiones, ya que entienden que al secretario general y candidato, Juan Espadas, no le convienen unas elecciones inminentes.
Desde el PP nacional han respaldado este miércoles la decisión que adopte el presidente andaluz, ya que aseguran que hará «lo mejor para los andaluces», al igual que defienden que hicieron la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
Por el momento, Moreno tiene a favor todas las encuestas, que le dan una holgada victoria, pero no podría repetir el gobierno actual con Ciudadanos, como es la voluntad de ambos partidos, y tendría que recurrir a pactar un Ejecutivo con Vox.
La fórmula que persiguen los populares andaluces, si no se puede dar de nuevo el gobierno bipartito con Ciudadanos pero obtienen una amplia victoria, es la de un gobierno en minoría con el apoyo de investidura de Vox.
