Esta decisión se produce tras la polémica suscitada en torno a la «exención médica» del serbio Novak Djokovic, detenido por las autoridades de inmigración australianas en un hotel de Melbourne, donde también se encuentra Renata Vorácová.
Según medios australianos, Renata Vorácová, de 38 años, ingresó al país en diciembre con una exención médica otorgada por la federación australiana (TA), organizadora del torneo, ya que recientemente se recuperó del covid-19.
Sin embargo, las autoridades australianas indicaron que este argumento no era válido para obtener un permiso especial para ingresar al país, donde se aplicaron duras medidas para contener la pandemia.
Djokovic, quien llegó a Melbourne la noche del miércoles, también con una exención médica, para defender su título en el Abierto de Australia, está a la espera de una audiencia programada para el lunes en un tribunal de Melbourne para escuchar los argumentos de su apelación.
La vacuna es obligatoria para ingresar a Australia, pero existen exenciones temporales para las personas que tienen «una condición médica grave» que no pueden vacunarse porque contrajeron covid-19 en los seis meses anteriores o tuvieron una reacción adversa al medicamento.
La revocación de la visa de Djokovic, líder del ranking mundial, generó tensiones diplomáticas entre Australia y Serbia, cuyo presidente denuncia el acoso al deportista, mientras que el país oceánico defiende que no hay excepciones en la aplicación de las leyes fronterizas.