El entrenamiento se suspende en Liverpool debido a la existencia considerable de casos positivos de Covid-19 y la sospecha de más. Tras conocerse más resultados este miércoles, el club se puso en contacto con las autoridades y tomó la decisión de cerrar el centro de entrenamientos.
El Liverpool hizo ayer un pedido formal a la Liga para posponer el partido de mañana contra el Arsenal, tras confirmar un estallido: además de nueve jugadores que no son opciones por lesión y casos positivos de Covid-19 (el técnico Jurgen Klopp dio positivo, también su suplente Pepijn Lijnders, uno de los nuevos casos esta mañana), Salah, Sadio Mané y Naby Keita se encuentran disputando la Copa África, lo que significa que los Rojos no tienen el número mínimo de jugadores para el partido. La rueda de prensa previa al partido con los artilleros se canceló debido a la creciente amenaza.
De acuerdo con las regulaciones de la Liga, un partido puede posponerse si un club no puede enviar 13 jugadores de campo y un portero al partido. Hoy se conocerá la decisión de la EFL.
El partido que medía a los dos equipos era correspondiente a la semi-final de la Carabao Cup.